BIBLIOTECAS: PEDIDO PARA REFORZAR LAS POLÍTICAS IMPLEMENTADAS POR EL GOBIERNO NACIONAL Y PROVINCIAL

La Concejal Romero presento nuevamente proyecto de Ordenanza, en la cual se crea el “Programa Municipal de Apoyo a las Bibliotecas de la Ciudad de Puerto Madryn” para las bibliotecas que estén inscriptas en la Dirección de Inspección General de Justicia. La propuesta tiene por objetivo apoyar a las instituciones mediante recursos económicos a fin de contribuir al desarrollo y sostenimiento de las actividades de las instituciones además de reforzar las políticas implementadas por el Gobierno Nacional y Provincial.  En los distintos Barrios de nuestra ciudad funcionan bibliotecas que ejercen el pleno del derecho a la información, recreación y animación socio cultural, en el marco pluralidad ideológica; en ellas existen necesidades para la adquisición de libros; recursos humanos; tecnologías informáticas y gastos de servicios para poder desarrollarse. Estas instituciones tienen un carácter social y solidario, su objetivo principal es la atención de necesidades de educación no formal que debe acompañar al desarrollo cultural de la comunidad a la que sirve y de la que forma parte.

La socialización del libro, de la información y del uso de la información va más allá del simple y cotidiano hecho de “prestar” el material en la Biblioteca; favorece la superación individual, el progreso grupal y de la superación comunitaria, manifestaron los Concejales.

La ayuda económica que se establece en el proyecto de Ordenanza será un monto del “aporte proporcional para cada una de las Bibliotecas”, pudiendo financiarse de: las  partidas asignadas por el Presupuesto Municipal; El uno por ciento (1 %) de las utilidades líquidas del “creación del fondo federal solidario”; Gestiones del D.E.M. ante Instituto de Asistencia Social en juegos de azar y de las gestiones del DEM de Subvenciones y subsidios recibidos de organismos Municipales, Provinciales, Nacionales e Internacionales tanto públicos como privados. El programa será ejecutado por la Dirección de Cultura, quién distribuirá semestralmente los recursos económicos, equitativamente entre las Bibliotecas que cumplan los requisitos de la presente Ordenanza y su Reglamentación. El origen de estas instituciones se remonta a la Ley 419, del 23 de septiembre de 1870, cuyo promotor fuera el entonces Presidente Domingo F. Sarmiento; al presentar el proyecto de Ley al Congreso de la Nación, el educador afirmó que «el medio más poderoso para levantar el nivel intelectual de una nación, diseminando la ilustración en todas las clases sociales, es fomentar el hábito de la lectura hasta convertirlo en un rasgo distintivo del carácter o de las costumbres nacionales”.