Hoy el tema central fue el “Día de la Lealtad” para ello los integrantes del programa se comunicaron con el Compañero Héctor Flores, Lic. en Ciencia Política, Diplomático de carrera, conferencista, escritor, ensayista. Actualmente es Presidente de la Corporación General de Profesionales y Coordinador de la Mesa Convocante del Consejo Superior Peronista.

El Compañero Héctor Flores, hizo una reseña sobre lo que sucedió en nuestro país un 17 de octubre, hace concretamente 68 años; quién manifestó que “el día 17 de octubre del 1945 es un día único e irrepetible en la historia argentina, siendo la única vez en la historia de la patria donde un pueblo sale a pedir la libertad de Perón, que estaba preso en la Isla Martín García….” , “El pueblo, sin ser llevado ni convocado nada más que por la gratitud y la lealtad a un hombre que había señalado el camino de una nueva argentina, ese pueblo salió a la calle no convocado por nadie…” “El 17 de octubre fue importante porque la gente salió espontáneamente…”

“Perón, desde la gloriosa revolución del 4 de junio de 1943, en muy poco tiempo, había logrado realizar una enorme transformación en materia social y también una tarea de adoctrinamiento muy importante en la segunda y terceras líneas del movimiento obrero…”

Entre otros conceptos esgrimidos por el compañero Flores, se refirió a la diferencia que existe entre ser militante y mercenario; sobre la juventud, manifestó que hay jóvenes que tienen inquietudes para llegar a ser un militante hay que tener una fe y una convicción muy profunda, la gran diferencia entre el militante y el mercenario es que el mercenario trabaja por la paga y el militante lucha por la fe, militante viene de milite que es el soldado de la fe, para diferenciarse de los que luchan por la paga, ambos luchan pero evidentemente que lo que necesita el Movimiento Peronista es recuperar una militancia a partir de una convicción y olvidarnos definitivamente de nombres y apellidos, Perón nos enseño que la revolución más trascendente es el transito del “yo” al  “nosotros”, y este nosotros, ese pueblo que es el heredero de Perón debe producir un trasvasamiento generacional en unidad de concepción porque de nada sirve estar en la calle y trabajar políticamente si no hay una unidad de concepción y como ya nos enseñó el general la mejor forma de organizar es adoctrinando, lamentablemente las estructuras partidarias del Peronismo permanentemente han echado a menos  los esfuerzo de los que hemos permanentemente estado en tarea del adoctrinamiento y la capacitación porque adoctrinando se organiza, se organiza a partir de la convicción y no de la conveniencia…”