Estancada en los últimos años, sus defensores la presentan ahora como una solución al cambio climático y a la dependencia de los combustibles fósiles El debate sobre si impulsar o no la energía nuclear vuelve a estar de actualidad. Recientemente, España recalcaba públicamente su decisión, dada a conocer a principios de diciembre, de una agenda para reducir progresivamente la energía nuclear. Por su parte, la UE también hacía referencia hace unos meses en
Bruselas al futuro de esta energía en la Europa de los 27. Sus defensores la presentan como un sistema limpio, sin emisiones de gases contaminantes ni de efecto invernadero (GEI); seguro porque cuenta con sistemas más modernos; y necesario, porque permite reducir la dependencia energética de los combustibles fósiles. Sin embargo, sus críticos recuerdan sus problemas, como el de los residuos radiactivos, y destacan que frenaría a las energías renovables, las únicas que en su opinión pueden abastecer de manera ecológica las necesidades mundiales. ¿Se reabre el debate nuclear? España se posiciona en el uso de la energía nuclear de la siguiente manera: «la intención es mantener una política razonable, progresiva, de reducción de la energía nuclear», para lo que se apuntaba la elaboración de una «agenda de futuro de la energía nuclear en nuestro país.Hace unos meses, la cumbre de la Unión Europea (UE), celebrada en Bruselas, trataba de lograr acuerdos contra el cambio climático. Sin embargo, Francia en aquel aprovechaba la reunión para tratar de convencer al resto de países de la necesidad de la energía nuclear en la lucha contra el cambio climático, al no emitir GEI. Asimismo, recalcaba que las fuentes renovables sólo pueden ayudar de manera parcial al reto de la UE en este campo. El interés francés por la energía nuclear es evidente. Sus 59 reactores generan el 78,45% de su electricidad, lo que le convierte en el país del mundo con mayor porcentaje de este tipo de energía. El objetivo de Francia es seguir potenciando esta fuente de energía, y de hecho, a finales de 2007 comenzará la construcción de una central nuclear de tipo EPR (reactor europeo de agua presurizada, por sus siglas en inglés) en la localidad de Flamanville (Noroeste), que le permitirá exportar energía a otros países, entre ellos a España.
En 1990, en lo que ahora es la UE, había 164 centrales nucleares, mientras que ahora hay 147. A pesar de ello, en los últimos años el despliegue nuclear ha estado más bien paralizado. En Estados Unidos, histórico impulsor de esta energía, su presidente, George W. Bush, lleva promoviéndola desde hace seis años, aunque no ha iniciado ninguna planta. En toda la UE, sólo Finlandia, tras grandes debates, decidía construir el primer reactor europeo en 15 años. De nombre Olkiluoto 3, su entrada en funcionamiento está prevista para 2009, y será el reactor nuclear más grande del mundo. Asimismo, Eduardo González, Presidente del Foro de la Industria Nuclear Española, subraya que también se están construyendo dos nuevas centrales en Bulgaria y una en Rumanía. Según José Santamarta, responsable del Instituto World Watch en España, en 1990, en lo que ahora es la UE, había 164 centrales nucleares, mientras que ahora hay 147. Asimismo, en todo el mundo, en los últimos doce años, se han clausurado 33 centrales nucleares y se han inaugurado 54, menos de dos reactores al año. Algunos países, como Alemania, prevén incluso el abandono planificado de su producción nuclear. No obstante, gran parte de los países con reactores nucleares no están dispuestos a cerrar estas instalaciones, aun en los casos de países como Hungría, República Checa, Eslovaquia, Eslovenia o Lituania, cuyos reactores de tipo soviético deberán cerrarse por razones de seguridad de aquí a 2009. En Gran Bretaña, el anterior primer ministro, Tony Blair, declaró su intención de construir nuevas centrales para garantizar el suministro de la isla ante el agotamiento del petróleo del Mar del Norte. Asimismo, los expertos recuerdan que la UE participa en el proyecto ITERde construcción de un reactor de fusión, y que el Tratado Constitucional conserva el Tratado EURATOM de 1957 para la promoción de la Energía Atómica como un apéndice, en el que destaca su importante papel. En cualquier caso, mientras los países de la UE deciden si seguir o no impulsando la energía nuclear, países como China, que planea la creación de 50 plantas nucleares en las dos próximas décadas, o la India, con ocho en construcción, lo tienen más claro. La Europa nuclear, en cifras Según datos del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), perteneciente a Naciones Unidas, de los diez países con mayor porcentaje de electricidad de origen nuclear en el mundo, siete pertenecen a la UE: Francia (78,45%), Lituania (69,59%), Eslovaquia (56,05%), Bélgica (55,12%), Suecia (46,66%), Bulgaria (44,09) y Eslovenia (42,35%). Asimismo, otros países europeos también cuentan con esta energía en mayor o medida: Alemania (30,98%), España (19,56%), Finlandia (32,91%), Holanda (3,91%), Hungría (37,15%), Italia, Reino Unido (19,43%), República Checa (30,52%) y Rumanía (8,57%). En definitiva, la energía nuclear produce en la actualidad el 10% del total de la que mueve Europa, y llega hasta el 30% en la producción de electricidad. Por ALEX FERNÁNDEZ MUERZA