Blaa…Blaa…Blaa…Blaa…

lorosPalabras, palabras, palabras, solamente palabras. Los habladores hablan, hablan y hablan. Pretenden cambiar la historia. Los hechos vividos que fueron los que ocurrieron y no los que querían que fueran. Son periodistas deportivos y no dudo que así sea, pero quieren hacernos creer que Argentina no perdió el último partido. La planilla es demostrativa: Alemania 1 – Argentina 0, los del viejo continente ganaron. Ahí nomás pero triunfaron.  

El penal que no fue, la falta de puntería, la entrega física y mental de nuestros jugadores, el transpirar la camiseta de la A.F.A., apéndice de la F.I.F.A., los fantásticos que hicieron muy poco, casi nada, los defensores que no defendían y luego frenaron todo, el arquero de cuestionado a héroe. Se mejoró sustancialmente, con Demichelis, Biglia y Enzo Pérez, a tal punto que Irán nos provocó más situaciones de gol que Alemania. En la final, se pudo ganar y no fue posible. En los cálculos previos, perder daba en la suma y resta. Se perdió. Ahí nomás, por un golcito pero las matemáticas mandan. Lo demás es puro cuento. Le gustan los cuentos a los porteños. Su voz es la única voz. No hay otra. Sigue siendo igual. Nuestros caudillos dieron la vida. Todo igual como era entonces. No nos quieren. Lo sabemos. Todo por ser como son, los que habitan en la selva de cemento.  Blaa…Blaaa…Blaa…, palabras que vienen y van. No hay forma de cambiar nada. La planilla de la F.I.F.A. lo refleja. Los partidos no se merecen ganar, se ganan con goles, no hay otro secreto. Si la pelota no golpea los piolines interiores del arco adversario, es imposible ganar. Higuain fallo, Messi erro y a Palacio lo atoro el arquero. Cuando se dice “perdimos pero ganamos”, es una mentira más grande que una casa. Se pudo ganar, pero no se ganó, se perdió, el gol alemán lo dice todo, Rusia 2018 es una nueva oportunidad. Ojala en la tierra de los cosacos, aparezca ese goleador que nos haga cantar: “aplaudan, aplaudan, no dejen de aplaudir, los goles de ………. que ya van a venir”. Hay cuatro años por delante, aprovechémoslos. Autor: El croata futbolero.