Las peripecias del pesquero Pensacola y sus tripulantes

Karamarko 1Señor Presidente, señoras diputadas y diputados, hace unos días, escuchando FM radio del mar de la ciudad de Comodoro Rivadavia, me anoticio a través del periodista radial Marcelo Valey, un hombre de reconocida trayectoria en el mundo de las comunicaciones que, el barco pesquero Pensacola, se hallaba con problemas motrices y a la deriva con once tripulantes a bordo. De acuerdo a las estimaciones, su ubicación se daba en esos momentos a unas 70 millas náuticas de Camarones. Se había perdido la comunicación pero otro barco pesquero llego al lugar y se comunico con los tripulantes respecto de los problemas suscitados. Uno piensa, estar varado en cualquier lugar es un problema, me imagino lo que debe ser estar en medio del mar, y me da escalofríos solo de pensarlo. Hasta ahí, se trataba de un problema grave pero existen los medios para lograr rescatarlos y llevarlos a buen puerto. El problema se presento cuando los familiares de las personas que tripulaban el Pensacola requirieron información a la Prefectura como organismo nacional responsable del desenvolvimiento en el mar. Al requerir precisiones sobre la situación de quienes se encontraban a la deriva en la inmensidad marítima supuestamente argumentaron que de acuerdo a la vigencia de un nuevo protocolo comunicacional debían pedir autorización a las autoridades nacionales para satisfacer la pretensión de ser informados. El tiempo transcurría inexorablemente y las preocupaciones aumentaban y escaseaban las respuestas con las tres C como las llamo: claras, concretas y concisas. Los tripulantes eran en su mayoría vecinos de Caleta Cordova y Restinga Ali, a quienes por sus apellidos uno los conoce por estar siempre vinculados a la pesca y a tener la guapeza de una y otra vez adentrarse en el mar para ganar el pan con el sudor de la frente. Después de muchas idas y venidas, sin lograr su cometido, los familiares pudieron tener la certeza que un remolcador se dirigía al lugar para rescatar y trasladar al Pensacola y su tripulación. Si es así como se ha informado, desde nuestro Bloque del Partido Justicialista elaboraremos un Proyecto de Declaración pidiendo como corresponde hacerlo que se modifiquen instrucciones que realmente en la era de las comunicaciones en donde todo sucede en tiempo real, haya que tener en cuenta un protocolo informativo que primero debe pasar por la supervisión de las autoridades nacionales de Prefectura para recién poder comunicar a los interesados, en este caso a los familiares de los tripulantes que estaban a la deriva en el océano atlántico. Personalmente iré a recabar información concreta por ante las autoridades locales del organismo nacional responsable de lo que pasa en el mar territorial, adyacente y la Zona Económica Exclusiva, no así en el llamado Mar Libre establecido por la Convención del Mar de Montego Bay en 1.982. Desde el Bloque del Partido Justicialista, nos pareció interesante compartir esta experiencia vivida que tanto dolor de cabeza les causo a los familiares de los tripulantes del Pensacola y por supuesto a quienes estaban a la deriva en esa inmensidad maritima.