LA SABIA Y SEÑERA PALABRA DEL GENERAL PERÓN:

LA SABIA Y SEÑERA PALABRA DEL GENERAL PERÓN: «ROMA NO PAGA TRAIDORES» era un apotegma conocido en los tiempos del imperio. Cuenta Plutarco que, en la conquista de la PERSIA, dos generales persas se presentaron a Alejandro el Grande para proponerle su ayuda en una traición contra su propio Rey, DARIO. Alejandro los escuchó y ordenó que los degollaran. Desde entonces, los traidores han sido siempre los mismos, lo que ha variado han sido sólo los hombres que los utilizan, porque a tales traidores corresponde semejantes contratantes.

En la política, que en el campo de las realidades no es sino lucha, vale decir dos voluntades contrapuestas, la traición puede ser usada sin medida, cuando las bajas pasiones y la inmoralidad han pesado más que las virtudes y el bien hacer. Pero en últimLa psicología de la traición tiene innumerables gradaciones y características: los hay de toda laya, desde el que se vende por dinero o por prebendas, hasta el que lleva la traición adentro y así no puede escapar a su influencia.

Todos tratan de disimular su infamia escudándose en lo que suelen llamar «viveza» y «habilidad», sin percatarse que en el «pecado lleva la penitencia», porque aún gozando de beneficios inmediatos, no escapan a la sanción de su propia infamia, ya que los que proceden mal, terminan víctimas de su propio mal procedimiento.

La permanente vigilancia que nosotros debemos hacer logra que nos informemos, y ella nunca ha fallado.

Ahora sabemos bien quiénes se han prestado o se prestan para tan sucio negocio y así no nos puede resultar imposible neutralizar a los elementos comprometidos o propensos.  o análisis, tan miserable es el traidor, como el que se vale de él para traicionar.