MÁS QUE «UNA MASCOTA»: LOS BENEFICIOS DE VIVIR CON UN PERRO

Por Laura Pardina Suárez: La llegada al hogar de un perro puede tener más repercusiones positivas de las esperadas, según se está demostrando. En el plano de la salud física, estudios realizados en los Estados Unidos demuestran que el hecho de vivir con animales reduce el impacto del estrés en el organismo, regula la presión sanguínea y los niveles de colesterol y disminuye el riesgo de sufrir un infarto.

La doctora Deborah Wells, psicóloga de la Universidad de Queen, en Belfast, indica que los perros son los animales que más beneficios aportan al estado de salud de las personas. No solo hace hincapié en los beneficios físicos, sino también en los psicológicos. Los perros disminuyen la incidencia o los efectos de dolencias como la ansiedad y la depresión. Tienen la capacidad de entender a los humanos y actuar de la mejor manera posible para ayudarles. sexto sentido” de los perros: ¿A qué se debe esa capacidad? César Millán, más conocido como “el encantador de perros”, sugiere en sus libros que los perros pueden ayudar mucho al ser humano, puesto que nos hemos olvidado casi por completo de interactuar con la Naturaleza, algo innato en nosotros pero que, debido al actual estilo de vida, se va relegando hasta casi desaparecer. Los perros, sin embargo, mantienen intacta esa facultad, lo cual les permite captar tanto los cambios atmosféricos como el advenimiento de un desastre natural, como pueda ser un terremoto. Asimismo, su conexión con el mundo natural también les faculta para detectar el estado de ánimo de las personas, actuando en consecuencia. Esa capacidad es reconocida por la gran mayoría de dueños de perros, que afirman que éstos son capaces de darse cuenta de cuándo están tristes, irritados, nerviosos… por ejemplo, cuando detectan tristeza no se separan de sus amos, o se esconden en un rincón cuando notan que el dueño llega a casa de muy mal humor después de un duro día de trabajo. La actitud de los perros lleva a sus amos a darse cuenta de su propio ánimo negativo y a intentar poner remedio. perros y las personas mayores: Para las personas de edad, los perros son muy beneficiosos. No hay más que pensar en un anciano que vive solo: si un perro llega a su vida, le va a regalar grandes dosis de compañía y cariño, algo de lo que los mayores, desgraciadamente, suelen carecer. Adicionalmente, su nuevo amigo le va a hacer sentir otra vez el placer de ser útil y de cuidar de “alguien”. Y ya que se trata el tema de los ancianos, es un hecho que este colectivo mejora su salud de forma espectacular por el hecho de tener un perro. El can necesita salir a pasear al menos quince minutos, tres veces al día, lo cual obliga a la persona mayor a abandonar una vida quizás sedentaria en demasía y dar como mínimo tres caminatas, lo cual va a mejorar su motivación, su movilidad y coordinación, su circulación y muchos problemas de salud ligados a la edad. De gran importancia es el estudio realizado en la residencia de ancianos “Parc Serentill” de Badalona, en el cual se analiza la percepción por parte de los mayores de la convivencia con dos perros golden retriever, iniciativa en la que participa la Fundación Purina. Los resultados del estudio indican que desde que los perros viven allí, los ancianos se sienten más acompañados, menos aburridos, pueden expresar afecto con más libertad y naturalidad… los canes han alegrado su vida. Asimismo, la organización norteamericana de defensa canina Greyhound Friends ha demostrado los beneficios resultantes de las visitas cotidianas de un grupo de galgos a los ancianos de una residencia. La Terapia Asistida con Animales de Compañía (T.A.A.C.). Fundaciones caninas y la ONCE: Los beneficios de tratar con un perro son evidentes, tanto que incluso existe una terapia que considera la relación con el animal como la parte esencial del proceso hacia la mejoría o la curación. Se trata de la denominada en España “Terapia Asistida con Animales de Compañía”, la cual no solo trabaja con canes sino también con caballos, burros, gatos… incluso delfines. La T.A.A.C. (o TEAAC) no es algo nuevo; ya existe constancia de ella en el siglo XVIII, cuandoWilliam Tuke introdujo el trabajo con perros en las terapias dirigidas a los enfermos mentales ingresados en su institución “Retiro de York”. Desde entonces, han sido innumerables las iniciativas de T.A.A.C. Por citar algún ejemplo, la Fundación Affinity cuenta con programas para promover la salud física y mental de ancianos y enfermos mentales; así, es de destacar su labor en el Centro Psiquiátrico San Juan de Dios de Ciempozuelos. Numerosos estudios serios demuestran la eficacia de la terapia con animales en campos muy diversos, además de los ya citados:

  • en centros penitenciarios: aumento de la motivación, disminución de la agresividad y de trastornos como ansiedad y depresión.
  • en adolescentes con problemas: optimización de su relación con los demás, mayor integración en la sociedad, aumento de la autoestima, mejoría en trastornos de anorexia y bulimia.
  • en enfermos crónicos: estado de ánimo más optimista, mayor estimulación sensorial.
  • en discapacitados físicos: no hay más que constatar la labor de los perros lazarilloadiestrados por la O.N.C.E. gracias a su Fundación de Perros Guía, que ha ayudado a tantísimos invidentes a poder realizar las tareas cotidianas de la vida diaria. Una hermosa forma de colaboración con esta fundación es acoger en sus primeros meses de vida a los perros que llevarán a cabo tan importante trabajo. Grandes amigos y colaboradores: Aunque evidentemente los seres humanos y los perros son especies animales distintas, hay barreras que la Naturaleza permite cruzar. La colaboración nacida hace miles de años entre el hombre y el can ha cambiado considerablemente: la relación ya no se basa en conseguir el sustento diario. Pero lo que continúa inalterable es ese entendimiento mútuo nacido entre dos especies diferentes, que hace que cada una dé lo mejor de sí misma a la otra. Y es innegable que en el hecho de dar los perros son grandes maestros, ofreciendo amistad, comprensión, lealtad, alegría, serenidad, ayuda en las tareas cotidianas, motivación… ¿Dónde acaba la lista?. Magacine.